El 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental, una buena ocasión para recordar que la salud mental es un derecho humano cuyo disfrute está amenazado por los problemas de acceso y calidad de la atención en un Sistema Nacional de Salud en riesgo y debilitado, como lleva meses denunciando Amnistía Internacional. Además, la pandemia ha supuesto un duro golpe para la salud mental de la población.