AI, TRATAMOS DE LA TRATA AICV (Amnistía Internacional Comunidad Valenciana) ha organizado un taller telemático sobre la trata de personas con fines de explotación sexual. La primera parte ha tenido lugar el 14 de noviembre de 10h a 13.30 horas. El informe “Cadenas invisibles: identificación de víctimas de trata en España”[1], publicado el pasado 15 de […]
AI, TRATAMOS DE LA TRATA
AICV (Amnistía Internacional Comunidad Valenciana) ha organizado un taller telemático sobre la trata de personas con fines de explotación sexual. La primera parte ha tenido lugar el 14 de noviembre de 10h a 13.30 horas.
El informe “Cadenas invisibles: identificación de víctimas de trata en España”[1], publicado el pasado 15 de octubre, ha sido remitido a todos los grupos parlamentarios de Les Corts Valencianes, al Sindic de Greuges así como a la Consellería d’Igualtat i Polítiques Inclusives, entre otras instituciones. En el Informe, Amnistía Internacional (AI) denuncia cómo la identificación y, por lo tanto, la protección de las víctimas con fines de explotación sexual tiene graves fallos estructurales[2] porque prima la persecución del delito, lo que convierte a las víctimas en pruebas de investigación.
La trata de personas[3] es una gravísima violación de los derechos humanos[4] que afecta sobremanera a mujeres y niñas sobre todo en el trayecto migratorio. La incorporación de la perspectiva de género permite ver el impacto diferenciado atendiendo a la discriminación que sufren: un 99% de las víctimas de trata con fines de explotación sexual son mujeres y niñas[5].
Conviene tener en cuenta que la trata es distinta del tráfico ilegal de personas ya que existe la trata dentro de las fronteras interiores e implica fines de explotación como trabajo forzoso, servidumbre por deudas, matrimonio forzoso, por ejemplo. La trata se basa en el engaño que se vale de mentiras o coacciones para controlar y dominar a la víctima[6].
Siendo España puerta de entrada de migración a Europa, se convierte en un país de destino y tránsito para la trata. Y AI investiga a fondo el problema estableciendo cinco áreas prioritarias de trabajo:
-Recopilación y unificación de datos sobre identificación de víctimas, ya que solo se recogen los que proporcionan las operaciones policiales y no los de ONG. Además, no están desagregados por género ni se recogen indicadores como diferentes tipos de discapacidad.
-La detección de víctimas de trata es una labor casi exclusiva de las ONG especializadas.
-No se prioriza la protección de derechos de las víctimas sobre la persecución de delitos con el fin de ayudarlas a salir del círculo de explotación.
-La protección se vincula a la denuncia o colaboración de las víctimas, centrándose en la persecución penal del delito, por lo que las víctimas son instrumentalizadas para la investigación.
-Los servicios de tutela no están especializados para garantizar la protección de menores.
Los Estados deben adoptar medidas para prevenir la trata, proteger los derechos de las víctimas, asegurando su identificación y asistencia, y garantizar el acceso a la justicia y protección durante el proceso judicial.
Es España hay carencia de datos, mecanismos de detección temprana y falta de protección de las niñas. Lamentablemente, la falta de datos fidedignos no permite un conocimiento del número de víctimas reales y potenciales. Los únicos datos oficiales son los proporcionados por el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), que incluyen únicamente a las víctimas que han sido identificadas formalmente tras la apertura de un atestado dentro de una investigaciónllevada a cabo por la Policía Nacional o la Guardia Civil. En España solo mil de las 75.000 personas que, según el Gobierno, estaban en situación de riesgo de trata con fines de explotación sexual han sido identificadas finalmente como víctimas en los últimos siete años[7]. “Las autoridades no deben olvidar que tienen obligación de proteger a las víctimas con independencia tanto de su estatus migratorio como de la capacidad de la víctima para colaborar en la persecución del delito de la que es objeto[8]. A causa del confinamiento, la mayoría de las medidas del Plan de Contingencia contra la Violencia de Género[9] dirigidas a las víctimas de trata no se han materializado.
La realidad es que las ONG son los principales agentes de detección de víctimas de trata. AI no ha podido obtener datos sobre las detecciones realizadas que no sean parte de las unidades específicas de la policía especializada en la lucha contra la trata.
Conociendo que la estigmatización de las personas que están en contextos de prostitución aumenta el miedo y la desconfianza en las mujeres, sobre todo hacia las autoridades y la policía, la sanción en la calle en aplicación de las ordenanzas municipales y la Ley de Seguridad Ciudadana dificulta la identificación de las mujeres víctimas de trata criminalizando a las trabajadoras sexuales. Prima el enfoque policial, la nacionalidad de las víctimas, el estado de ilegalidad y no el que sería conforme a los derechos humanos: la explotación que sufren. No se profundiza en las raíces de la explotación ni en las causes ni en las consecuencias. No se garantiza un enfoque de género y protección de los derechos humanos. En cuanto a los niños y niñas, “entre policía y fiscalía de pasan la pelota de qué hacer en caso de que las menores se hagan pasar por mayores de edad […] y lo mismo sucede con los niños y niñas que viajan solos”[10].
El amarillismo de la prensa se detiene en el éxito de la policía, sin rozar las múltiples maneras de ser explotado: no solo existen las cadenas físicas, están las mentales. Las razones del proceso de verse sometida una persona a trata no son tan simples como los estereotipos que se han creado; se atiende a un determinado perfil de víctima de trata y si no se corresponde lo descartan.
Es indispensable identificar a las víctimas de trata a la llegada a fronteras que no suelen ser conscientes de su situación, porque todavía no se ha producido la explotación, y que no se van a autoidentificar ni pedir ayuda a las autoridades, por el miedo a represalias de los tratantes, relaciones de sumisión o violencia o temor a la deportación.
Cuando una persona no es reconocida como solicitante de asilo, la atención es paliativa, es decir, no hay un programa o itinerario específico para su acogida.
Ante todo ello, AI pide al Gobierno central que se aprueba una LEY INTEGRAL CONTRA LA TRATA DE SERES HUMANOS con perspectiva de género e infancia, . Igualmente pide que se revise el artículo 59 bis de la Ley Orgánica de Extranjería[11].
Se debe garantizar que las personas migrantes y refugiadas reciban información sobre sus derechos a su llegada, así como identificar a las víctimas de trata activando mecanismos eficaces de protección con especialistas en derechos humanos y trata.
Solo una Ley integral de Trata de Seres Humanos consolidará la perspectiva que sitúa en el centro a las víctimas y garantizará un enfoque integral basado en los derechos humanos, abordando la Trata en todas sus formas, creando un marco de obligaciones y un mandato a todas las administraciones. Una Ley dotada de coherencia jurídica, que hará efectiva la responsabilidad de dar seguimiento y evaluación del cumplimiento de todas los actores de las obligaciones contraídas.
Una Ley Integral para garantizar que España cumple con el mandato de protección y asistencia a las víctimas de trata establecido en la legalidad vigente (Convenio Consejo de Europa, Directiva del Parlamento europeo, Convenio de Estambul….)
Valencia cuenta con un “Protocolo de intervención con víctimas de trata para la explotación sexual en la ciudad de Valencia”[12].
Te pedimos que firmes esta petición:
Dicha petición se enviará al Relator Nacional contra la trata de seres humanos.
https://violenciagenero.igualdad.gob.es/fr/laDelegacionInforma/pdfs/Relator_Trata1.pdf
EQUIPO COMUNICACIÓN COMUNIDAD VALENCIANA
E.Sopeña
Agradecemos a Carmen Soto, activista en AI España desde su creación en 1978, Coordinadora del área de trabajo para mujeres en AI de la Comunitat Valenciana y miembro del equipo autonómico de relaciones institucionales, la revisión de este artículo
Imagen de Dimitris Vetsikas en Pixabay
[1] https://doc.es.amnesty.org/ms-opac/doc?q=*%3A*&start=0&rows=1&sort=fecha%20desc&fq=norm&fv=*&fo=and&fq=mssearch_fld13&fv=EUR41600020&fo=and&fq=mssearch_mlt98&fv=gseg01&fo=and
[2] Virginia Álvarez, autora de la investigación y responsable de Política Interior en AI.
[3] Definición de trata: Protocolo para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas, especialmente mujeres y niños, que complementa la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional. Art. 3 a)
https://www.ohchr.org/documents/professionalinterest/protocoltraffickinginpersons_sp.pdf
[4] Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas: Derechos Humanos y la trata. Folleto informativo 36, 2014.
https://www.ohchr.org/documents/publications/fs36_sp.pdf
[5] Estimaciones mundiales sobre la esclavitud moderna: trabajo forzoso y matrimonio forzoso. Resumen Ejecutivo, 2017. Datos recogidos en el periodo de 2011-2016.
https://www.ilo.org/wcmsp5/groups/public/—dgreports/—dcomm/documents/publication/wcms_575479.pdf
[6] https://www.es.amnesty.org/en-que-estamos/reportajes/trata-en-espana/
[7] https://www.es.amnesty.org/actua/acciones/espana-trata-berta-oct20/?utm_source=twitter&utm_medium=social&utm_content=Web_petition-pai_espana_oct20_berta-Amnesty–20201114-4140285864-TWITTER&utm_campaign=Web_petition-pai_espana_oct20_berta-Amnesty-Women%27s_Rights
[8] Esteban Beltrán, Director de AI.
[9] https://www.comunidad.madrid/sites/default/files/aud/servicios-sociales/funcionamiento_red_vg_comunidad_de_madrid_estado_alarma_covid19.pdf
[10] https://www.publico.es/sociedad/victimas-trata-amnistia-denuncia-graves-fallos-estructurales-proteccion-victimas-trata.html
[11] https://www.supercontable.com/informacion/laboral/Art._59_bis_._Ley_Organica_4-2000-_derechos_y_libertades_.html
[12]https://www.valencia.es/mujer/mujer.nsf/0/743FBF136CF90117C12581AF0044BDA4/$FILE/Protocolo%20castellano.pdf?OpenElement&lang=1
