EL COVID19 DESDE LAS RESIDENCIAS. LOS APLAUSOS ESTÁN BIEN PERO … Si triste y estresante ha sido y es vivir el confinamiento en casa, cuánto más triste es la vida de aislamiento en las residencias geriátricas. Muchas de las personas que en ellas se encuentran pasaron las secuelas de la guerra y ahora, en la […]
EL COVID19 DESDE LAS RESIDENCIAS. LOS APLAUSOS ESTÁN BIEN PERO …
Si triste y estresante ha sido y es vivir el confinamiento en casa, cuánto más triste es la vida de aislamiento en las residencias geriátricas. Muchas de las personas que en ellas se encuentran pasaron las secuelas de la guerra y ahora, en la época final de sus vidas, de la noche a la mañana se ven totalmente aisladas y privadas de la compañía de sus familiares. Se suma que muchas de las personas ancianas ni siquiera entienden la situación. Solo gracias a la buena voluntad del personal sanitario pueden ver a sus seres queridos por videollamada.
Los centros de mayores y también los de personas con discapacidad han sido uno de los grandes focos de contagio del covid19, porque las personas que en ellos viven son las más vulnerables y el virus se ha cebado con ellas. El personal sanitario, además, carecía de material para evitar el contagio o por lo menos para minimizarlo. Se habían olvidado de esos entornos cerrados de gran vulnerabilidad en los que resulta de por sí muy difícil evitar el contagio por la edad avanzada de las personas que allí habitan y las múltiples comorbilidades que padecen, es decir la coexistencia de varias enfermedades en una persona-.
Pero, a pesar de la carencia de medios, el personal sanitario se ha desvivido por las personas ancianas arriesgando su salud y su vida por ellas. Baste el siguiente ejemplo: las personas trabajadoras de una residencia privada de Murcia decidieron aislarse voluntariamente junto a sus internos y pasar juntos el confinamiento provocado por la pandemia. La directora del centro indicó que entre los profesionales confinados hay “auxiliares, médicos, enfermeros, fisioterapeutas, cocineros, administrativos y trabajadores sociales, además de ella misma”[1]. Treinta y dos trabajadores habilitaron distintas zonas para dormir y antepusieron su obligación y su vocación como sanitarios a su vida propia.
Los aplausos están bien, las palabras también, pero lo que realmente han necesitado y siguen necesitando es soporte de todo tipo, que se acuerden de que esas personas ancianas son muy frágiles y merecen toda la atención, y de que el personal sanitario que trabaja en estos centros es valiente y solidario y necesita la protección justa y necesaria.
“Estamos un poco mejor porque venimos de protegernos con bolsas de basura, de enfrentarnos a esto sin ninguna protección y con muy poca información sobre nuestra seguridad”[2].
Esta pandemia no ha acabado, ¡qué más quisiéramos!, va a seguir golpeando nuestro sistema sanitario y el Gobierno debe proteger a su abnegado personal sanitario, les/nos va la vida en ello.
ES URGENTE: Pide al Ministerio de Sanidad que proteja a quienes están en primera línea, #ProtegeAlPersonalSantario. Firma y se lo exigiremos en tu nombre.
https://www.es.amnesty.org/actua/acciones/coronavirus-personal-sanitario-mar20/
https://www.es.amnesty.org/actua/acciones/coronavirus-personal-sanitario-mar20/
EQUIPO COMUNICACIÓN COMUNIDAD VALENCIANA
Emma Sopeña Balordi
Imagen de Gaertringen en Pixabay
[1] https://www.laopiniondemurcia.es/comunidad/2020/03/20/trabajadores-residencia-murcia-aislan-internos/1100707.html
[2] https://www.es.amnesty.org/actua/acciones/coronavirus-personal-sanitario-mar20/
