Amnistía Internacional ha constatado que la naturaleza pacífica de la acción de desobediencia civil llevada a cabo por estas ocho personas activistas es reconocida incluso por los agentes de la Guardia Civil en sus declaraciones en fase de instrucción. En atención a estos elementos, Amnistía Internacional manifiesta preocupación por el hecho de que estas ocho personas fuesen privadas de libertad por espacio aproximado de ocho horas y enfrenten penas de privación de libertad por los delitos de resistencia y desobediencia y de coacciones, pese a la naturaleza totalmente pacífica de la acción de desobediencia civil realizada.