Defensor de Derechos Humanos en gira por La Rioja
Deivin es un defensor de la tierra, de los derechos humanos y de las comunidades campesinas en el Cauca en Colombia. Visitó la Rioja traído por Amnistía Internacional a principios del mes de abril visitando diversos centros escolares que colaboran activamente con la Red Escuelas por los Derechos Humanos y participando en la entrega de premios del Concurso de este año de esa red.
Deivin Jesús Hurtado es un colombiano fuerte, joven, sereno, comprometido y cercano, también es un padre de familia amenazado, que iba con escolta por su seguridad, pero no era suficiente. El riesgo para su familia y para él fue demasiado alto y tuvo que marcharse.
Amante de su tierra natal, Colombia, habla de ella con ternura y añoranza, pero también con dolor; el dolor de sentir que su pueblo tiene que enfrentarse a la violencia institucional y de las bandas paramilitares. Es uno de tantos líderes sociales y defensor de los derechos humanos que han tenido que huir Colombia. Ahora, hace apenas unos meses, vive en paz en España intentando empezar una nueva vida, pero sin dejar de denunciar la violencia que sufre su país y la vulneración constante de los derechos humanos por las diferentes instituciones en Colombia, uno de los países más peligrosos en todo el mundo para las personas que defienden los derechos humanos, los territorios y recursos naturales. Su propio caso le sirve para denunciar los cultivos ilícitos de cocaína ante las autoridades nacionales e internacionales.
Comprometido desde la juventud con la justicia y la igualdad social, estudió derecho para poder dar respuesta a las demandas de las zonas rurales y del campesinado que necesitaba saber cómo avanzar en sus derechos. Se convirtió en el portavoz de la lucha campesina y realizaba acompañamiento a las organizaciones campesinas, indígenas, estudiantiles y sindicalistas en el departamento del Cauca. Fue objeto de un atentado en el año 2013 que le causó importantes heridas que hicieron peligra su vida. Desde entonces, no ha dejado de sufrir amenazas que se han extendido a su familia. Hoy, sus vidas están protegidas en estos momentos al estar acogido al Programa temporal de protección de defensores de los DDHH que tiene Amnistía Internacional desde el año 1998.
Unos centenares de estudiantes, cuyos centros escolares colaboran educativamente con Escuelas por los DDHH. pudieron escuchar el relato de su vida y de su compromiso a través de la energía de su voz y el dolor de su corazón. Abrir las puertas a su testimonio y conocer de primera mano la situación actual de los derechos humanos en Colombia, fue una experiencia que los jóvenes no olvidarán nunca. Deivin fue el altavoz de la lucha por los derechos humanos que lleva adelante Amnistía Internacional en todo el mundo desde su creación en el año 1961.
Poner cara a la vulneración y acoso a los derechos de las personas, hizo reflexionar a los jóvenes sobre el mundo que tenemos y el que queremos y sirvió de estímulo para la solidaridad y empatía contra la injusticia.