Si uno de tus propósitos para este año es ser una persona más comprometida y contribuir a generar un mundo mejor y más justo pero no sabes por dónde comenzar, no te preocupes, te damos algunas ideas para iniciarte en el activismo y luchar por los derechos humanos. ¡Apunta!
Si uno de tus propósitos para este año es ser una persona más comprometida y contribuir a generar un mundo mejor y más justo pero no sabes por dónde comenzar, no te preocupes, te damos algunas ideas para iniciarte en el activismo y luchar por los derechos humanos. ¡Apunta!
Texto basado en este post de Alba Herrera (AI Catalunya). Traducción: Mar Pozuelo.
1 – La defensa de los derechos humanos comienza en casa: tal vez ya sabes que muchos de los productos cosméticos y alimenticios que consumimos habitualmente están hechos de aceite de palma y derivados. Lo que tal vez no sabes es que estos ingredientes proceden a menudo del trabajo infantil, del trabajo forzoso y de las violaciones de derechos humanos que se producen en algunas plantaciones de palma. En concreto, una investigación de Amnistía Internacional denunció que las plantaciones de la empresa Wilmar (proveedora de marcas como Colgate-Palmolive, Kellogg’s, Nestlé, Rekitt Benckiser, Procter & Gamble, Ben & Jerry’s o Unilever) en Indonesia emplean a niñas y niños de entre 8 a 15 años. Además, no hay condiciones de seguridad y la mayoría de las trabajadoras y trabajadores tienen lesiones debidas a la utilización de productos químicos extremadamente tóxicos.
También puedes revisar tu consumo de tecnología. La mayoría del cobalto (componente fundamental de las baterías de litio) lo extraen niñas y niños y personas adultas en condiciones de explotación y peligro. Algunas empresas automovilistas (Daimler, Renault, Volkswagen, General Motors, Tesla, BMW, Fiat Chrysler) utilizan este mineral para la fabricación de coches eléctricos y no garantizan que el proceso de extracción del cobalto no está exento de abusos de los derechos humanos. Lo mismo ocurre con el cobalto de los teléfonos móviles y las tablet, ya que las grandes empresas de tecnologías de la comunicación (Apple, Sasung, Sony o Huawei) no controlan si sus proveedores respetan los derechos humanos.
Hacer un consumo crítico, difundir esta información entre tus contactos y reclamar cambios en estas empresas puede ser un buen paso para hacer activismo este año. Además, ¡funciona! A raíz de esta campaña internacional Apple y Sony han publicado la lista de todos sus proveedores de cobalto; Samsung se ha comprometido a investigar las denuncias de Amnistía y a publicar un informe sobre sus conclusiones; Wilmar ha hecho público un plan de acción para eliminar los abusos en sus plantaciones; Unilever y Procter & Gamble han informado de que van a emprender medidas al respecto; y Ben & Jerry ha retirado el aceite de palma de sus productos.
2- Recicla tu móvil: el reciclaje puede ser una buena forma de hacer una aportación a los derechos humanos. Si tienes en casa un teléfono móvil o una tablet que ya no utilizas, puedes sumarte a nuestra iniciativa de reutilización y reciclaje de teléfonos y tablet. Contribuirás a proteger el medioambiente y los derechos humanos al mismo tiempo.
3 – Contraargumenta: tal vez te hayas encontrado últimamente en medio de una conversación en la que se dudara de la necesidad de la políticas de lucha contra la violencia de género o hayas leído en Twitter a alguien que defendía que las mujeres no sufren violencia desproporcionadamente por el hecho de ser mujeres. Este tipo de discursos y argumentos son muy peligrosos porque, en el fondo, se posicionan contra los derechos de las mujeres. ¿Quieres hacer activismo? ¡Da una respuesta! Aquí puedes encontrar argumentos fundamentales que te ayudarán a desmontar mitos e informaciones falsas sobre este tema.
4 – Hazte socio: si quieres formar parte del mayor movimiento internacional de derechos humanos, hazte socio de Amnistía Internacional y defiende los derechos humanos cada día. Nuestro trabajo se realiza con total independencia. Para preservar nuestra imparcialidad, no aceptamos subvenciones de gobiernos ni partidos políticos. Cuantas más personas seamos, más podremos hacer por los derechos humanos.
5 – Firma: una de las principales líneas de trabajo de Amnistía Internacional es la recogida de firmas para casos y campañas de defensa de los derechos humanos. Las peticiones se dirigen a las autoridades y otros responsables de que estos derechos no se respeten. ¿Aún no lo haces? ¿Pues a qué estás esperando? ¡Firma!
6- Activista en Twitter: Si te mueves como pez en el agua en las redes sociales, ¡puede ser una buena oportunidad para hacer activismo! Usa tu perfil para participar en las twitter-acciones que ponemos en marcha por diferentes campañas. Para estar al tanto de las propuestas, ¡síguenos!
7- Lleva los derechos humanos a la escuela. ¿Trabajas en un centro escolar? Formas parte del AMPA? ¿O quizás eres estudiante? En cualquiera de estos casos, puedes defender los derechos humanos en tu centro. Sólo tienes que entrar en nuestra Red de Escuelas por los Derechos Humanos y encontrar alguna actividad que puedas llevar a cabo. Y si quieres estar al tanto de todas las propuestas educativas, ¡inscribe tu centro educativo!
8 – Escribe cartas y salva vidas: cuando nos llega la noticia de que una persona se encuentra en situación de peligro extremo a causa de la violación de sus derechos humanos, activamos una red formada por decenas de miles de personas en todo el mundo que hacen presión enviando cartas y correos electrónicos a las autoridades pertinentes para salvar a esta persona. Desde 1973, esta iniciativa ha permitido evitar ejecuciones, torturas y mejoras la situación de muchas personas. Si quieres formar parte de nuestra Red de Acciones Urgentes, puedes hacerlo aquí
9 – Hazte activista: si quieres estar en primera línea y dedicar parte de tu tiempo y de tu energía a la lucha por los derechos humanos, nuestros grupos de activistas son el lugar perfecto para ti. Podrás organizar actividades para dar a conocer los derechos humanos en tu localidad, recoger firmas, presionar a los gobiernos, generar cambios en la vida de miles de personas. Busca tu grupo más próximo o escríbenos a castillalamancha@es.amnesty.org y ¡sé Amnistía!