8M FEMINISMO, REVOLUCIÓN Y LUCHA
Nada nos detiene
Este 8M queremos visibilizar a las mujeres que viven en medio de una guerra
AMNISTÍA INTERNACIONAL SE UNE A LAS MOVILIZACIONES EN ANDALUCÍA EN EL DÍA DE LA MUJER
Gaza
Sin atención médica, sin alimentos, con riesgo de sufrir violencia y responsables
de los cuidados: el día a día de las mujeres en los conflictos armados
Las mujeres de Gaza son las principales víctimas de la intervención israelí que, en
opinión de la Corte Internacional de Justicia, pone a la población en riesgo inminente
de genocidio
Amnistía en Sevilla, Alcalá de Guadaira y Universidad Pablo Olavide
El 70 por ciento de las personas fallecidas en Gaza desde el 7 de octubre de 2023 han sido
mujeres y menores de edad, más de 17.000, según la UNWRA. Aproximadamente un millón
de los 1,9 millones de personas desplazadas son mujeres y niñas, según ONU Mujeres. Y las
condiciones higiénicas en las que se encuentran los refugios masificados a los que están
llegando las personas desplazadas, impacta especialmente en ellas, que apenas tienen
acceso, por ejemplo, a productos higiénicos, y que carecen de intimidad a la hora de ir a
unos baños en condiciones deplorables. El nivel de asistencia humanitaria vital que llega a la
Franja es muy inferior a lo que la población necesita.
A esto se unen las deficientes condiciones en las que se encuentran los hospitales en Gaza,
que no pueden dar atención adecuada a personas heridas, personas enfermas, o mujeres
que van a dar a luz. La media de nacimientos en los Territorios Ocupados Palestinos es de
4,1 por mujer. Cuando empezó el conflicto en octubre de 2023, unas 50.000 mujeres estaban
embarazadas y sin acceso a salud obstétrica, y unos 20.000 bebés habrían nacido desde el
inicio de los ataques.
Amnistía en Almería y Cádiz
Los riesgos de que en los conflictos se incremente la violencia contra las mujeres y la
violencia sexual como arma de guerra son altísimos, en un contexto en el que muchas se ven
obligadas a separarse de sus familiares, se quedan sin sus redes de apoyo, enviudan,
pierden a sus hijos, o ellas mismas son asesinadas. Las mujeres corren más riesgo de no ser
atendidas médicamente ni en las enfermedades, ni en los partos; muchas de ellas, además,
bajo las bombas o en la huida hacia otras ciudades u otros países deben hacerse cargo de
los menores y los mayores de la familia.
Amnistía Internacional ha podido constatar que esta situación es aún más grave en conflictos
como el de Gaza, donde Israel ha creado unas condiciones que, en opinión de la Corte
Internacional de Justicia, ponen a la población en riesgo inminente de genocidio. Esto ya
pudo observarse en la situación de la comunidad yazidí a manos del autodenominado Estado
Islámico, que en 2014 llevó a cabo atrocidades a gran escala contra la población civil en la
región de Sinjar, al norte de Irak: homicidios masivos, violencia sexual, tortura y esclavización
de mujeres y niñas, más de 5.000 personas muertas y más de 400.000 personas tuvieron
que salir de sus hogares.
“Cuando hay un conflicto, una guerra o una invasión, más que nunca se deben activar
medidas que protejan a las mujeres contra la violencia de género y la violencia sexual que
aumenta en este tipo de situaciones por muchas razones: la ausencia del Estado, la
desconfianza en las autoridades ocupantes, el estigma que conlleva revelar experiencias de
violencia sexual. Pero también se deben tomar medidas que garanticen el acceso a servicios
de salud adecuada durante sus embarazos y partos. Se les deben facilitar recursos y medios
para la subsistencia, tanto para ellas como para sus hijos e hijas, o sus mayores. Y
especialmente se deben impulsar medidas específicas de protección para las mujeres
desplazadas y refugiadas”, manifestó Beatriz Martos, responsable del trabajo sobre las
mujeres en Amnistía Internacional.
Poco avance para la protección de las mujeres
Este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, Amnistía Internacional no quiere olvidar a las
mujeres y las niñas que están viviendo en medio de una guerra, nos solo en Gaza, sino
también en Ucrania, Etiopía, o Siria, por nombrar algunos de los conflictos que siguen
abiertos en estos momentos.
En 2000, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó la Resolución 1325 sobre
las mujeres, la paz y la seguridad, que reconocía que la guerra afecta de manera diferente a
las mujeres. También este año, se cumplen 30 años de la Conferencia de Población y
Desarrollo de El Cairo, en la que se establecían pautas para la obligada protección de los
derechos sexuales y reproductivos de las mujeres y niñas también durante las situaciones de
conflicto.
“Lamentablemente, poco se ha hecho en lo que va de siglo para garantizar los
derechos de las mujeres que están viviendo en conflictos. Las mujeres no solo no
han sentido ningún tipo de protección o que sus situaciones particulares no son
tenidas en cuenta, sino que no han dejado de ver como sus derechos, incluidos sus
derechos sexuales y reproductivos se vulneran día tras día”, señaló Beatriz Martos.
Ucrania. Después de dos años de invasión a gran escala de Rusia, la situación está
teniendo efectos perjudiciales en la salud mental, física, sexual y reproductiva de las mujeres.
Los ataques a hospitales han limitado el acceso a la asistencia médica; las mujeres se ven
obligadas a tomar decisiones de vida o muerte por sus hijos e hijas o por sus mayores que
no pueden acompañarlas cuando se han visto obligadas a abandonar el país. Quienes lo
hicieron, al no contar con vías de evacuación segura, tuvieron gran riesgo de convertirse en
víctimas de trata con fines de explotación sexual. Y en cuanto a sus propios cuidados, los
limitados suministros y altos precios de los artículos para la menstruación, las obligan a elegir
entre alimentos o productos sanitarios.
Amnistía internacional en Campo de Gibraltar y Córdoba
Etiopía. Los delitos sexuales perpetrados contra las niñas y las mujeres en tiempos de
guerra constituyen crímenes de guerra y posibles crímenes de lesa humanidad. La violencia
sexual se ha cometido con escandalosos niveles de brutalidad, palizas, amenazas de muerte
e insultos étnicos. Amnistía Internacional ha podido documentar este tipo de violencia en la
zona del Tigré occidental, incluso tras la firma del Acuerdo de Cese de Hostilidades, contra
mujeres detenidas por las Fuerzas de Defensa de Eritrea por sospechas de que sus
cónyuges, hijos o familiares eran miembros de las fuerzas de Tigré.
Siria. Quienes se vieron obligadas a salir del país y están retornando, sufren ahora
represalias por parte de las autoridades, que les acusan de traición o de apoyar el
“terrorismo”. En algunos casos, se actuó contra personas retornadas simplemente porque
eran originarias de zonas de Siria que estuvieron bajo el control de la oposición. Amnistía
Internacional ha documentado castigos brutales, incluida la violencia sexual, contra quienes
consideran sospechosos en pasos fronterizos o centros de detención durante interrogatorios.
8M en la calle
Amnistía Internacional el Jaén y Málaga
Amnistía Internacional este 8 de Marzo sale a la calle para recordar a las mujeres que están
sufriendo las consecuencias de las bombas en diferentes partes del mundo. Activistas de
Amnistía Internacional participarán en manifestaciones en más de 30 ciudades, entre ellas,
Granada, Jaén, Córdoba, Sevilla, Universidad Pablo de Olavide, Almería, Málaga, Campo de Gibraltar, Cádiz, Huelva, Alcalá de Guadaira.