A veces, la sensibilidad de un grupo respecto a la situación de una persona refugiada, el respaldo académico a una situación que se conoce bien y el interés de las personas afectadas -algunas de ellas amenazadas y perseguidas- por dar a conocer sus problemas se dan la mano de forma solidaria para que un proyecto alcance puerto.
Esto es lo que se produjo el lunes 13 de marzo en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Madrid, en una jornada en que personas procedentes de estos tres ámbitos dieron a conocer ante un público, básicamente universitario, la situación de violación de todo tipo de Derechos Humanos (DDHH) que se produce en Guinea Ecuatorial, un país al que nos une -entre otras cosas- una gran deuda histórica.